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La Facultad de Agronomía de la UBA y la empresa de biotecnología Bio Sidus presentaron hoy al potrillo "Bs Ñandubay Bicentenario", el primer clon equino viable de Latinoamérica, lo que posiciona a la Argentina entre uno de los cuatros países del mundo con capacidad para reproducir caballos de alto valor mediante clonación.

El animal, un equino de la raza criolla, nació el pasado 4 de agosto y fue clonado a partir de células de piel de un laureado caballo de la misma raza.

La presentación se hizo al mediodía en el Salón auditorio de la Universidad Argentina de la Empresa (UADE), de esta ciudad, donde se destacó la asistencia del ministro de Ciencia y Técnica, Lino Barañao.

"Esta tecnología de clonación es de particular importancia para caballos de salto, polo o endurance, partiendo de ejemplares de buen desempeño, pero sin capacidad reproductiva, debido a castración u otros motivos", explicó la empresa Bio Sidus.

El potrillo fue gestado además en la cabaña "Don Antonio", en la provincia de Buenos Aires, perteneciente a la firma TresArg, que fue responsable de los trabajos de campo y aportó los ejemplares de caballos criollos.

Bio Sidus, la Facultad de Agronomía y TresArg conformaron un equipo con tecnología de clonación que hizo posible llevar a cabo todos los pasos relativos a la generación de embriones, transferencia embrionaria, manejo de la preñez y hasta el exitoso parto del animal.

"Bs Ñandubay Bicentenario goza hoy de perfecta salud a poco más de un mes de vida del éxito logrado en el proceso, siendo el primer equino en nacer por un método de clonación en el país y el primero con esta nueva técnica en el mundo", precisaron las autoridades de Bio Sidus.

Para clonar al potrillo se utilizaron células de piel de un caballo criollo llamado "Nandubay", que fueron cultivadas y luego fusionadas a un óvulo al que previamente se le había retirado su material genético (enucleación).

La célula resultante de esta fusión celular fue activada para obtener un embrión que fue convenientemente llevado a los campos de la cabaña "Don Antonio".

Allí se realizó la transferencia del embrión al útero de una yegua hormonalmente preparada para recibirlo.

Desde ese momento la preñez fue monitoreada celosamente hasta que un mes antes de la fecha de parto la yegua preñada fue trasladada a un centro de salud equina de excelencia.
En ese lugar finalmente nació "BS Ñandubay Bicentenario", a quien se le tomó una muestra de pelo para poder certificar en forma fehaciente que era en efecto un clon.

El material se envió al laboratorio de Genética Veterinaria de la Universidad de California, en Estados Unidos, máximo centro de referencia mundial en estudios genéticos equinos.
Desde allí llegó la confirmación de que los perfiles genéticos de ambos animales, el potrillo y el macho criollo, eran idénticos.

El ministro Barañao subrayó hoy que "el nacimiento de este clon equino tiene un valor en sí mismo, que es posicionar a la Argentina como un país innovador" en la materia.
"Esto trasciende al beneficio de una empresa y pasa a ser el patrimonio de todo el país", manifestó el funcionario.

Finalmente, Barañao puntualizó: "Este resultado muestra un perfil de país distinto al cual podemos llegar, que sea un país altamente innovador con un alto nivel educativo y con un gran porcentaje de empresas de base tecnológica". DyN

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