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Científicos argentinos desarrollaron una novedosa técnica con la que se puede determinar el sexo de un embrión antes de que este sea transferido en un animal. Ya la están realizando en caballos, ya que en el mundo del polo hay una fuerte tendencia en la búsqueda de obtener hembras que demuestran una mejor performance deportiva frente a los machos.

La técnica denominada “Biopsia de embriones y Sexado” permite tomar una muestra de un embrión (en realidad se toma una muestra de lo que en un futuro será placenta, sin afectar al embrión propiamente dicho).

Con esta pequeña muestra (de unas 10 células), luego se realiza un procedimiento que permite determinar la presencia de un gen que se encuentra en el cromosoma Y, que se encuentra solo en los machos. Si se observa éste, entonces el embrión es macho, de lo contrario será una hembra. La prueba que se realiza para determinar esto se denomina PCR (Polymerase Chain Reaction o en español Reacción en Cadena de la Polimerasa); es una técnica que se utiliza para amplificar un fragmento de ADN.

Lo novedoso logrado en Argentina, es la implementación de la técnica con elementos simples aplicada en equinos, mientras que en otros países, esta técnica es llevada a cabo, pero utilizan equipamientos más complejos. “Nosotros demostramos que con un equipamiento más simple podemos lograr incluso con los mismos resultados”, afirma en diálogo con EL OTRO MATE Andrés Gambini, un veterinario cordobés integrante del equipo investigador.

El logro fue obtenido en conjunto entre la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires y el Centro de Transferencia de Equinos “La Vanguardia”. En la Facultad funciona el Laboratorio de Biotecnología Animal, dirigido por el Dr. Daniel Salamone. Junto a otros dos veterinarios, Javier Jarazo y Andrés Gambini, se realizaron en este laboratorio las biopsias de los embriones. La PCR fue realizada en el mismo laboratorio por el biólogo molecular Dr. Rafael Fernández Martín. Los embriones fueron obtenidos y luego transferidos en el mencionado centro de transferencia de Willem Melchior. El veterinario a cargo de las obtener los embriones, realizar las transferencias y monitorear las gestaciones fue el Veterinario Leonardo Muredas.

“Luego de demostrar nuestra experiencia en biotecnología equina a través del nacimiento de los primeros clones equinos viables de Latinoamérica, surgió la necesidad de desarrollar otras tecnologías en esta especie que aún en nuestro país no estaban implementadas. Así es como decidimos poner a punto la biopsia y el sexado de embriones, para que en un futuro cercano el productor pueda acceder a ella. Puntualmente, nuestro país es uno de los actores más importantes a nivel mundial en materia de cría, producción y genética equina, especialmente de caballos de polo. Es por esto que decidimos desarrollar tecnologías que reposicionen aún más nuestro país en esta
área”, detalla Gambini.
Daniel Salamone, Andrés Gambini y Javier Jarazo

Daniel Salamone, Andrés Gambini y Javier Jarazo

El tener la posibilidad de conocer el sexo de un embrión antes que este sea transferido es un dato de suma utilidad. La cantidad de hembras receptoras (aquellas que reciben los embriones y lo gestan hasta el final) es una de las mayores limitantes en los centros de transferencia. Con esta herramienta uno tiene la posibilidad de transferir aquellos embriones del sexo deseado de acuerdo a los requerimientos de los clientes, permitiendo utilizar menos receptoras y garantizar el sexo del animal que se va a gestar.

Además la muestra que se obtiene del embrión, puede ser utilizada para otros diagnósticos además de determinar el sexo. Con ella uno puede realizar estudios que pueden establecer la presencia de enfermedades genéticas por ejemplo, permitiendo el diagnostico preimplantatorio de algunas patologías importantes.

En seres humanos esta tecnología ya es utilizada, principalmente para el diagnóstico preimplantatorio de enfermedades genéticas.

“Esta tecnología aún necesita ser trabajada para maximizar su eficiencia y poder ofrecerla de manera comercial masiva. Para el futuro, el cambio será que los productores de caballos podrán optar el sexo de sus crías, antes que estas se implanten en el útero de una yegua”, pronostica Gambini.

Nota: EL OTRO MATE
Foto: Andrés Gambini

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