Pedidos de las cuatro cadenas |
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Las asociaciones que representan a las cadenas del trigo, el maíz, la soja y el girasol realizaron una reunión de fin de año en la que propusieron una serie de modificaciones a la actual política agropecuaria.
En un acto realizado en la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el presidente de la Asociación Argentina de Trigo (Argentrigo), Santiago Labourt, en representación de las cuatro entidades por cadenas, dijo que se deberían reducir las retenciones, avanzar hacia un esquema de libre comercio de los granos, bajar el costo de los fletes y simplificar los controles aduaneros en los buques.
Con un tono que no buscó la confrontación con el Gobierno, Labourt dijo que la Argentina cuenta con un escenario internacional y con condiciones de competitividad para alcanzar la meta de producción de 150 millones de toneladas en 2020, tal como fijó el Plan Estratégico Agroalimentario (PEA) "que fue oportunamente presentado por la presidenta de la Nación", dijo Labourt.
Respecto de la presión impositiva, el directivo sostuvo que en la agroindustria alcanza el 44 por ciento, "uno de los porcentajes más los más altos de la economía", lo que "restringe la competitividad del sector y retrasa muchas inversiones necesarias", dijo. Respecto de los derechos de exportación, sostuvo que "sería deseable que se plantee un esquema de reducción gradual".
Sobre las restricciones al comercio, en el discurso, el presidente de Argentrigo puntualizó que "los anuncios de apertura anticipada de la campaña de maíz 2013 dieron resultados positivos en la intención de siembra". Sin embargo, en el caso del trigo, "de haberse anunciado con una mayor anticipación esta señal a los productores hubiese logrado un efecto similar al del maíz". Según Labourt, "esta tendencia definida desde el Gobierno debería avanzar hasta un esquema de libre comercio, dejando atrás el sistema de cupos y licencias no automáticas".
Respecto de los fletes, Labourt dijo que su nivel es elevado. "Muchas veces trasladar la cosecha desde el campo tiene un costo superior a la de llevarla en barco desde un puerto argentino del otro lado del Atlántico", sostuvo. Consideró que se debería aumentar la inversión en ferrocarriles y en infraestructura vial, mediante "una red troncal de autopistas".
Otro aspecto que marcó la preocupación de las entidades por cadenas es el de los controles extra que está haciendo la Aduana en los buques graneleros. Según Labourt, las demoras en el control de peso son "injustificadas", lo que "afecta la normal operatoria de los puertos y genera innecesarios costos que en definitiva paga todo el país".
Compartieron el escenario con Labourt el presidente de la Asociación Argentina de Girasol (Asagir), Ricardo Negri; el presidente de la Asociación del Maíz y el Sorgo Argentinos (Maizar), Alberto Morelli, y el vicepresidente de la Asociación de la Cadena de la Soja (Acsoja), Luis Zubizarreta.
Por el Gobierno, habló el secretario de Agricultura, Lorenzo Basso, quien hizo un repaso de las acciones de la cartera, en particular sobre el proyecto de ley de semillas y la fijación de una norma que regule la aplicación de fitosanitarios en las áreas periurbanas.
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