El manejo exitoso para controlar las malezas difíciles comienza mucho antes de la aplicación de los herbicidas residuales. La clave del éxito reside en poner los lotes a cero de malezas vivas. La dinámica del mercado agrícola en la Argentina lleva a que muchos lotes destinados a la siembra de maíz o soja se encuentren hoy con importantes cantidades de malezas vivas. Esto puede ocurrir por varios motivos, entre ellos por las demoras en los cierres de los contratos de alquiler, por los ahorros mal entendidos al no haber realizado los barbechos químicos otoñales y en el caso de que hayan sido realizados, que el tipo de herbicida residual utilizado no controle las malezas de nacimiento primavero/estival, o bien que el principio activo aplicado haya perdido residualidad. Ante esta realidad y ya en vistas de comenzar con las tareas de barbecho para la siembra de maíz temprano, girasol y soja de primera se recomienda poner a cero de malezas vivas los lotes, de modo tal que luego los herbicidas residuales necesarios generen un efecto contundente para lograr el éxito productivo deseado. En este sentido conviene tener especial cuidado con el Amaranthus, una maleza que ya se encuentra implantada en toda el área agrícola nacional, tanto en sus variedades hibridus como palmeri. Esta maleza requiere temperaturas de suelo de 18°C para su emergencia, por lo que las zonas donde está presente y con una salida del invierno sumamente benigna, le otorgan grandes chances de que se comiencen a ver los primeros pulsos de nacimiento. Estos no son los más numerosos, pero si se los deja evolucionar al estadío de planta, su control se hará cada vez más dificultoso y oneroso, con lo cual, la contundencia del secado marcará la diferencia entre hacer las cosas una vez bien o varias veces mal. Numerosos ensayos de desarrollo, tanto a nivel oficial como privado, muestran que la mejor táctica de manejo en la eliminación de plantas de Yuyo Colorado recién emergidas a la salida del invierno consiste en utilizar principios activos como Carfentrazone, en mezclas con 2.4 D no volátil, Glifosato y aceites minerales o vegetales metilados de última generación. Si el lote en cuestión presenta también problemas con Rama Negra, Viola y/o Flor de Santa Lucía, la utilización de Carfentrazone vuelve a ser una muy buena opción por su excelente performance sobre estas malezas muy comunes en los sistemas de producción actuales. FMC, compañía líder del mercado en portafolio de herbicidas, posee productos como Shark®, formulados en base a Carfentrazone, que en mezcla con 2,4 D Amina y Aceite tienen un excelente poder quemante sobre malezas del estilo del Amaranthus. Esta técnica de manejo es fundamental para lograr que los herbicidas pre-emergentes tengan el éxito necesario para lograr el objetivo planteado de reducir el stock de semillas de Amaranthus y otras malezas de difícil control del lote.