Autores: Pizzio Rafael, Bendersky Diego y Barbera Pablo.
Efecto del control de Chilca en la producción de carne
La principal actividad de la región Centro Sur de Corrientes es la ganadería extensiva mixta lanar-vacuna. El principal recurso forrajero de la región proviene del pastizal natural, compuesto por un estrato herbáceo con predominio de gramíneas, que en el sur de la provincia es acompañado por un estrato arbóreo. Las malezas en general constituyen un grave problema en estos sistemas productivos, y su presencia implica sub utilización y mal manejo de los recursos.
La proliferación de malezas puede tener varios orígenes, pero en el caso de los campos naturales generalmente el sobre pastoreo es la principal causa. Uno de los primeros síntomas del sobre pastoreo es la reducción de la disponibilidad de materia seca, seguidamente las especies forrajeras comienzan a perder su vigor, hay aumento en el porcentaje de suelo desnudo, acompañado de compactación del suelo y así se van dando las condiciones para que se instalen las malezas. El proceso de enmalezamiento es más rápido si el campo es roturado para agricultura o pasturas, y no se atiende la secuencia de cultivos secundarios.
Dentro de las malezas el complejo denominado CHILCA es sumamente importante. Este complejo es un grupo de malezas arbustivas principalmente de los géneros Baccharis y Eupatorium, que dependiendo del grado de enmalezamiento, el área de desperdicio en un potrero puede ser muy grande, disminuyendo considerablemente la capacidad de carga del potrero. En este artículo se presenta una alternativa de control de Eupatorium bunifolium (CHILCA) y su efecto sobre la producción secundaria del pastizal.
Desarrollo de la experiencia
El objetivo del ensayo fue determinar si el aumento del área de pastoreo a través del control mecánico-químico de la chilca (Eupatorium bunifolium) permite incrementar la capacidad de carga sin afectar la ganancia de peso de animales de recría, en un pastizal del sur de Corrientes con un elevado grado de enmalezamiento.
Para esto se utilizó en un potrero de 41,3 has del establecimiento Las Palmas (Curuzú Cuatiá), 23 has del potrero se dejaron como testigo y en las 18,3 has restantes se realizó un control mecánico-químico. El tratamiento consistió en un corte con desmalezadora en enero de 2007 y la aplicación en abril de 1 litro/ha de TORDON D 30 (2,4 D + Picloram) y 300 cm3/ha de aceite como coadyuvante. El primer año de pastoreo comenzó el 28 de mayo de 2007 con novillitos de 196 kg a una carga de 1,21 y 1,36 nov/ha para los lotes testigo y tratado respectivamente (carga 12,4% superior en el lote tratado) y finalizó el 2 de mayo de 2008. El segundo año de pastoreo se inició el 18 de julio de 2008 con novillitos de 197 kg a una carga de 0,96 y 1,36 nov/ha para los lotes testigo y tratado respectivamente (carga 43% superior en el lote tratado) y finalizó el 24 de abril de 2009.


Cambios en la vegetación
La efectividad del tratamiento de control de chilca fue de un 83% sobre el número inicial de plantas (Cuadro 1), además las plantas sobrevivientes tuvieron muy bajo vigor y poca participación en la composición botánica.
Cuadro 1. Densidad de plantas de chilca (Eupatorium bunifolium) en el área de muestreo del potrero tratado.
Densidad de Chilca Abril 07 Septiembre 07 Diciembre 07 Marzo 08
Plantas/m2 0,53 0,10 0,09 0,07

La disponibilidad del estrato graminoso fue similar en ambos potreros al comenzar el pastoreo en el primer año (Figura 1). En el potrero tratado, a pesar de soportar una carga animal superior, hubo una tendencia a incrementarse la disponibilidad a través de los dos años de pastoreo, hasta valores cercanos a los 1850 kg MS/ha. En el potrero testigo en cambio hubo una disminución en la disponibilidad durante el ensayo alcanzando valores menores a 1300 kg MS/ha (diciembre de 2007). Esto obligó a bajar la carga en el segundo ciclo de pastoreo, con lo que se logró una recuperación de la disponibilidad de MS al final de la experiencia (abril de 2009).

Figura 1. Disponibilidad de materia seca en los potreros tratado y testigo durante el desarrollo de la experiencia.
Producción animal
Los novillitos del lote tratado, con una carga 25% superior al testigo, tuvieron una ganancia de peso significativamente superior los dos años de la experiencia. La evolución de peso fue similar en el invierno y mayor durante el período estival en el lote tratado (cuadro 2). La mayor ganancia de peso y carga del lote tratado determinaron que la producción fuera un 35% superior (60 kg/ha/año) en este potrero con respecto al testigo en promedio de los dos años.
Cuadro 2. Evolución del peso vivo de novillitos en los potreros testigo y tratado.
Testigo Tratado
Peso vivo (kg/animal)
Inicial 196 202
Final 345 365
Incremento anual 149 163
Ganancia diaria de peso (g/día)
Invernal 59 -19
Estival 661 b 727 a
Total 506 b 552 a
Carga (animales/ha) 1,08 1,36
Producción de carne (kg/ha) 161,5 221,6
Letras diferentes dentro de la fila indican diferencias significativas en el test de Tukey (?=0,05)
Conclusiones
- El control de la chilca en el lote con una densidad de 0,5 plantas de chilca/m2 permitió incrementar la productividad secundaria durante 2 años en un 35%, a través de mejoras en la capacidad de carga y la ganancia de peso individual.
- El tratamiento de control combinado (mecánico y químico) resultó efectivo, no obstante algunas plantas de chilca sobrevivieron. De esto se desprende que para mantener el lote limpio debería hacerse posteriormente alguna tarea de control, ya sea química o mecánica. Es de esperar que con una intervención cada 2 ó 3 años se logre mantener a esta maleza arbustiva en un nivel que no afecte la producción del pastizal.
- De acuerdo a los resultados obtenidos un enmalezamiento de este tipo roba a nuestros campos naturales entre un 25 y 30 % de su superficie. Los 60 Kg de diferencia en producción obtenidos justifican económicamente el tratamiento de control de chilca. Por lo tanto, no debemos dejar que esta maleza nos quite una parte de nuestros campos naturales, que tanto valor tienen hoy en día.

Se agradece especialmente a la familia Reula por la realización de esta experiencia en su establecimiento, y a su capataz Sr. Juan Pujol por el trabajo y compromiso puestos en la actividad.