Hoy 26 de noviembre, FEPALE cumple 19 años y comienza el vigésimo.

Desde aquel lejano 1991 en el que nació esta Federación con media docena de asociados de igual número de países, se ha concretado -lo que entonces fue una muy buena idea- en una fuerte realidad.

Tal como solemos decir, aquello que fue concebido inicialmente como un puente de comunicación entre la lechería de varios países, se ha transformado en una potente red de caminos y carreteras que nos unen, comunican, entrelazan y contribuyen a la cooperación de los sectores lecheros de 19 países.

Instituciones públicas y privadas; entidades de productores y de industriales; de investigación y de formación; proveedores y muchos otros, son protagonistas de esta Federación que ya ha logrado un amplio reconocimiento internacional y que por méritos propios, se puede considerar la Organización Láctea de las Américas.

En estos años se ha demostrado que más allá de la heterogeneidad, que es una de las características de las lecherías de las Américas, existen puntos comunes de interés sobre los que se ha puesto énfasis y se ha logrado trabajar en forma conjunta.

El modelo de esta institución de integración vertical, que reúne todos los segmentos de la actividad, opera fluidamente en un diálogo más que intenso entre todos ellos.

Precisamente se ha definido como misión: “Promover el desarrollo del sector a través de la identificación de intereses comunes y actuar como foro de vinculación de las instituciones de la cadena láctea”.

Al aproximarnos a culminar la segunda década, la institución se encuentra muy pujante, llena de un activo de realizaciones concretadas y con un cúmulo de otras en pleno desarrollo y otras nuevas que fortalecerán y enriquecerán aún más, el servicio y atención que brindamos a nuestros miembros.

La reciente Asamblea de FEPALE, por primera vez fuera de las Américas, en la ciudad de Lugo, España, generó una amplia lista de líneas de trabajo nuevos y confirmó el seguimiento de otros exitosos. Para quienes llevamos años en la Federación, nos resulta muy grato comprobar el entusiasmo de nuestros asociados.

También sirvió el encuentro de Lugo, para comprobar la cordialidad de nuestros encuentros, elemento básico para fomentar relaciones y vínculos útiles para las actividades de todos. Esa cordialidad llevó ya hace unos años, a decir que nuestros encuentros son marcados por las sonrisas, lo cual no resto en absoluto el profesionalismo y la seriedad con que realizamos todas nuestras actividades.

Una muestra de esas sonrisas, es la foto de buena parte de los asistentes a Lugo y que hemos elegido para acompañar estos comentarios. También estamos agregando una foto de la primera Asamblea de nuestra Federación, efectuada en Sao Paulo, Brasil en 1992.

De aquí a un año, estaremos celebrando en Uruguay, según lo resuelto recientemente, el 20º Aniversario y lo haremos en una Asamblea llena de contenidos técnicos y profesionales, pero también en un festejo digno de la ocasión.

Los asociados de Uruguay cuando plantearon la propuesta, seguramente tenían en mente una verdadera fiesta de la lechería de las Américas.

Comenzado pues el último año de la segunda década, comprometemos todos nuestros esfuerzos, en continuar la búsqueda del crecimiento de la lechería de los países de las Américas y exhortamos a todos los asociados, instituciones y personas que están próximas a FEPALE, a que nos apoyen y contribuyan con su trabajo, para lograr en forma permanente ese fin.

Eduardo Fresco León
Secretario General