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MDZ 21-12-2022 - Carlos Boyadjian Una combinación de factores han puesto contra las sogas a las pequeñas y medianas empresas lácteas, que por estas horas están gestionando contra reloj una audiencia con el Gobierno, de carácter de urgente, para encontrar soluciones a una situación que para muchos productores se está volviendo crítica.
La Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel) expresó su preocupación por desfasaje entre la suba de costos, que llega en promedio a un 6%, y el ajuste de los precios en góndola, que con suerte está en el 4%, lo que genera distorsiones al interior de la cadena de valor, destaca el portal Agrofy News, especializado en negocios agropecuarios.
Pero a esto se suman algunos fenómenos que se vieron en los últimos meses, como los efectos de la sequía y la falta de pasturas frescas para los animales, las heladas tardías, los precios internacionales y hasta el dólar soja, y que tienen impacto en la estructura de costos de las compañías.
"Estamos inmersos en una crítica situación, producto de una serie de problemas como el tercer año de intensa sequía consecutiva, las heladas tardías, la baja de precios internacionales de la leche en polvo, la suba de costos de la ración para las vacas a causa de la guerra en Ucrania y luego por efecto del dólar soja", señala un comunicado de Apymel.
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Por otra parte, aclara que los "productos tienen precios atados a la pauta oficial del 4% mensual y los costos en dólares (cartón, plásticos, repuestos) que suben a la pauta de devaluación del valor oficial (6% mensual)".
Perspectivas negativas
En ese sentido, desde Apymel reclaman una "urgente recomposición del precio del tambero", claramente el primer eslabón de la cadena pero también el más débil.
Indican que la recomposición es necesaria para evitar el cierre de más tambos y, en consecuencia, la caída de la producción, lo que redundaría en un faltante de leche en el otoño, que suele ser la época de menor producción.
De acuerdo a datos del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) en marzo de 2017 había en el país 11.326 tambos, que cayeron a sólo 10076 este año, con 1.527.056 vacas lecheras. Comparado con datos de 2021, esto supone una disminución de 49.522 animales y el cierre de 370 unidades productivas. |
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