Revista Puerto 12-10-2022 - Roberto Garrone Atrás y muy lejos quedó la negociación paritaria por el primer tramo de 2022 en Mar del Plata, el cual tuvo la singularidad que arrojó esa medida de fuerza de los oficiales de máquinas del SICONARA como antesala de lo que después fue un 45% en dos cuotas sobre los ítems fijos hasta el mes de agosto para el sector del personal embarcado en la flota fresquera de altura.

En tierra, los estibadores del SUPA ya enarbolaron otro 25% a partir de septiembre, luego de hilvanar el 20% en febrero y el 20% en julio en el valor de los jornales por seis horas de trabajo. El SOIP estableció un 50% de actualización al mes de julio en la rama del fresco, en dos cuotas, con partes no remunerativas al igual que para los trabajadores de la conserva.

La inflación acumulada en los primeros ocho meses del año alcanza el 55% y la anual el 76,9%, con las principales consultoras proyectando una inflación para 2022 próxima al 100%. En los primeros ocho meses del año, el valor de la Canasta Básica de Alimentos se incrementó el 60,8 %.

En este contexto los gremios reanudaron las negociaciones con las cámaras empresarias para acomodar nuevamente los porotos. “La gente está ansiosa porque ve que el tiempo pasa y se pierde poder adquisitivo”, dice Pablo Trueba.

El Secretario General del SIMAPE reveló que la semana pasada el Ministerio de Trabajo ya notificó la reapertura de la paritaria del convenio colectivo de trabajo 586/10 de la flota fresquera de altura. “Todavía no nos dieron fecha para la primera audiencia”, reconoció el dirigente la semana pasada.

El SIMAPE a principios de año fue el primero en cerrar el primer tramo y ese 30% quedó corto al poco tiempo. “Podés firmar por arriba del 90% anual y quizás te quedás corto porque nadie sabe para dónde termina esto. Veremos cuál es la propuesta patronal”, amplió Trueba.

Tanto Fernando Rivera como Diego García Luchetti, representantes de CaIPA y Cámara de Armadores estuvieron de viaje fuera del país en septiembre y eso demoró las conversaciones. Ambos ya regresaron la semana pasada y por ahora, tanto en el SIMAPE como en el SOMU, aguardan que suene el teléfono con la convocatoria.

En lo que parece una estrategia diferenciada, al menos de lo que fue el primer tramo, las patronales ya se reunieron con Daniel Flores y dirigentes del SICONARA. El que se quema con leche… “Nosotros pedimos audiencia para sentarnos a negociar el 6 de septiembre”, dice Omar Bravo, secretario General del SOMU, signatario del CCT 708/15, un tanto impaciente por tantas demoras.

“Nadie quiere llegar a lo que pasó la otra vez”, dice Flores por el conflicto durante el primer semestre que paralizó la actividad de la flota durante una semana. “Pedimos el nivel inflacionario hasta diciembre. Ya tenemos un 45% y se habla de un 100% para todo 2022. Por ahí tiene que andar”, afirma el representante de los oficiales de máquinas.

Todo dependerá de la voluntad de la patronal pero algunos referentes sindicales no ven con malos ojos plantear el nuevo reajuste como otro tramo de la paritaria 22/23. Sería entre septiembre y diciembre, y luego completar con un tercer y último tramo, el porcentaje final.

La semana pasada también el SOIP tuvo su audiencia con el presidente de CaIPA. Ahí Cristina Ledesma no quiso revelar cuál fue el pedido puntual a la patronal, pero luego de la reunión de delegados del jueves se supo que la idea en el gremio del pescado es que no baje del 90%, con lo cual lo que restaría sería entre el 45% y 40%. La duda es si la actualización salarial se aplica sobre los valores de febrero o de julio. A diferencia de lo que piensan en algunos gremios marítimos, en el SOIP apuestan a cerrar toda la paritaria en esta negociación.

Veremos si la llegada de Raquel “Kelly” Olmos a la cartera laboral implica algún cambio en la relación de poder entre cámaras empresarias y sindicatos de la actividad marítima pesquera. De pasado menemista, la flamante funcionaria que reemplaza a Claudio Moroni viene de ser vicepresidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE).

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