Revista Puerto 05-10-2022 - Roberto Garrone «Distribuir el calamar que hay para reprocesar entre todos y esperar a que los barcos comiencen a pescar para tener más materia prima».

Esa fue la propuesta que desde Ardapez formularon a los trabajadores de Planta 1 durante la audiencia del lunes en la delegación bonaerense del Ministerio de Trabajo, luego que la semana pasada realizaran un reclamo y bloqueo del acceso al frigorífico sobre calle Vértiz y Bermejo.

El grupo conformado por 55 obreros, entre peones y envasadoras, todos registrados bajo convenio colectivo, viene reclamando que la empresa no les asigna la misma carga horaria ni nivel de trabajo que a los trabajadores del grupo conocido como «Planta 2», que procesa pescado en las mismas instalaciones.

Según pudo saber este medio, la oferta no los conformó porque no recibieron garantías de incrementar las horas de producción, pero de todos modos por el momento no piensan en repetir la protesta sino en persuadir a los trabajadores de Planta 2 para que los acompañen en la solución del problema.

Los barcos que saldrían a pescar son los cuatro Huafeng que participaron de la zafra de langostino en aguas nacionales. Los otros dos buques que tiene la empresa estuvieron abocados al variado costero pero esta no fue una buena temporada y las descargas bajaron más del 20% en relación con el año pasado. Esa merma, según dicen desde la empresa, es la que impidió que el grupo de Planta 1 tenga más trabajo porque son quienes reciben, clasifican y empacan el pescado entero.

«No podemos multiplicar los peces para que puedan tener más trabajo pero vamos a hacer lo posible para distribuir lo que hay y que todos trabajen»; refirieron desde Ardapez, que con Pedro Gordillo en el exterior, estuvo representada por Mariano Fuster, gerente de Producción, y la abogada Gadea Rivera.

El grupo de «Planta 1» quiere tener mayor cantidad de horas trabajadas durante las quincenas. Aseguran que en septiembre fueron convocados apenas seis días al frigorífico. «No queremos pelearnos con nuestros compañeros por el trabajo; es la empresa la que debe definir qué hace cada grupo. Es su pescado»; coincidieron en señalar los trabajadores, que asistieron a la audiencia acompañados por dirigentes del SOIP.

Conocida la noticia de la compra del permiso de pesca del «Pescargen IV» y la intención de Arbumasa de incorporar un nuevo barco potero y repartir la cuota de merluza entre su flota, allegados a la empresa aseguraron que nada tenía que ver esta decisión con la necesidad de atender las demandas laborales en el frigorífico de Vértiz.
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