Revista Puerto 05-10-2022 - Karina Fernández Ayer la feria más importante de productos congelados de la pesca quedó inaugurada con su habitual ceremonia de gaitas y la presencia de destacadas figuras del ámbito político, empresarial y de la FAO. Es notable el apoyo constante que recibe el sector para dar solución no solo a problemas puntuales como las limitaciones a la pesca de arrastre que impuso la Unión Europea, sino también en las ayudas económicas y financieras que se ponen a disposición de los empresarios para sobrellevar la crisis desatada por la guerra.

El predio IFEVI de Vigo de 40 mil metros cuadrados quedó cubierto ante la importante presencia de empresas del sector pesquero de España y otros 40 países que representados por 700 empresas exhiben sus productos ante una concurrida presencia de público. Varios países tienen su stand mostrando la oferta pesquera tanto de captura como de acuicultura.

Entre ellos está el pabellón argentino que durante todo el día albergó a una importante cantidad de empresarios nacionales que aprovecharon la oportunidad para reunirse con sus clientes. Se hicieron presentes representantes de las provincias de Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Río Negro. La provincia de Buenos Aires fue la única que no tuvo representación gubernamental.

Las expectativas de ventas no son muchas, recién es el primer día y los empresarios del sector congelador langostinero no se muestran ansiosos por vender, con un valor del producto que no termina de acomodarse prefieren mantener la calma y sopesar a lo largo de estos tres días que durará la feria, las posibilidades de colocar el crustáceo antes de las fiestas de fin de año, pero a un precio razonable.

La crisis ha afectado el consumo, lo sienten nuestros empresarios en la demanda y también lo siente el empresariado español. Quedó claro en las presentaciones realizadas por las máximas autoridades nacionales y locales que durante el acto de inauguración tomaron como uno de sus ejes la necesidad de apoyar al sector en este difícil momento.

El presidente de Conxemar, Eloy García Alvariza, por ejemplo solicitó la baja del IVA para la merluza y el langostino, llevándolo del 10% al 4% como forma de favorecer la comercialización. Por otra parte, la entidad bancaria ABANCA reafirmó su compromiso de apoyo al sector con líneas de crédito blandas.

La secretaria General de Pesca, Alicia Villauriz, tal como lo había hecho en el Congreso de FAO se refirió a una serie de créditos que se tomarán para dar ayudar al sector a mejorar su situación ante la caída del consumo y los desafíos que plantea la amenaza de prohibición del arrastre en 87 zonas por parte de la Unión Europea. Aunque en este punto ha señalado que no descansarán hasta revertir la medida.

Queda claro que todos están tirando de la misma cuerda. El alcalde de Vigo, Abel Caballero, fue categórico respecto de la defensa del sector: “Nadie nos va a enseñar lo que es la pesca sostenible, porque la pesca la hicieron nuestros tatarabuelos y las hacen nuestros hijos, queremos y sabemos sobre sostenibilidad biológica y económica. Vamos a hacer lo mejor como lo hemos hecho durante tantos años y como vamos a seguir haciéndolo por muchos años. Por eso queremos decirles que su normativa no nos parece adecuada, con poco conocimiento científico y con una visión desacertada y desequilibrada. Por eso decimos que tienen que escuchar las voces de los que quieren el mar y por eso le prestamos mucha atención al gobierno de España que es el que tiene que hacerse cargo de la demanda jurídica en la defensa de los intereses del sector”.

Para finalizar el presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, en el mismo sentido señaló: “Estamos manifestando nuestro compromiso con la sostenibilidad, el mar forma parte de nuestra cultura, nos importa la explotación responsable. Cualquiera puede comprobar que la actividad empresarial y la conservación de nuestro litoral llevan en Galicia muchísimos años conviviendo en armonía. Por lo tanto, querer dar marcha atrás para regresar a cinco décadas atrás, impulsando un conservacionismo extremo parece poco razonable. Somos los primeros interesados en preservar nuestras costas del cambio climático, por eso no podemos, ninguno de los que estamos aquí, estar de acuerdo con la decisión de la comisión europea”.

Ya sea para enfrentar los problemas económicos o de mercado, para financiar el crecimiento y el desarrollo del sector, para afrontar las consecuencias de una crisis desatada por la guerra o para defender los intereses del sector pesquero ante la Unión Europea, los empresarios pesqueros cuentan con todo un aparato gubernamental que se pone a su servicio. Una situación envidiable para los argentinos que, en tanto, para poner freno a avances ambientalistas que no contemplan el impacto en la actividad o por el contrario el avance de las petroleras sobre áreas pesqueras, para poder desarrollarse, crecer y modernizarse tratando de ser competitivos, se deben arreglar por su propia cuenta.

Más allá de la presencia activa de los representantes de Chubut, acompañando a los empresarios de su provincia y propiciando encuentros con sus pares de España, la realidad del empresariado argentino dista mucho de la del español que goza del sostén de todo el abanico gubernamental y el apoyo de las entidades financieras, que alivianan la carga en momentos difíciles.
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