La Verdad - 07-09-2022 - José Luis Amado Ayer lunes, se publicó en el Boletín Oficial el decreto de necesidad y urgencia número 576, mediante el cual se creó ayer el “Programa de Incremento exportador”, que incluye a la soja y a sus subproductos y su puesta en marcha fue inmediata.

Este nuevo mecanismo intenta acelerar la venta de soja para aumentar el ingreso de dólares al Banco Central y que las reservas vuelvan a un nivel positivo.

Lo primero que hay que destacar es que el anterior sistema de liquidación no funcionó por varias razones. Fue engorrosa su adhesión y además a los pocos días de su anuncio, la exministra Silvina Batakis fue reemplazada por Sergio Massa, lo cual generó desconfianza devaluatoria y consecuente retracción en la venta de los granos.

El debut
Si bien la nueva medida es temporal, porque termina el próximo 30 de este mes, los empresarios sojeros se encontraron ayer a la tarde que el nuevo precio ya estaba reflejado en la pizarra de precios oficiales. Aunque se supo que las operaciones fueron muy pocas, el precio de la pizarra acusó 72.500 la tonelada de soja con descarga inmediata.

En síntesis, el nuevo “dólar-soja”, elevó el precio de la tonelada de los $52.100 del viernes pasado a 72.500 ayer. Es decir, se obtuvo un aproximado del 40% más.

Opinión
Una de las voces muy escuchadas dentro del sector agropecuario es la del asesor Salvador Di Stefano, en cuanto a este nueva forma de liquidar la soja dijo: “El que venda, se va a cubrir por los gastos en pesos de los próximos meses, como también comprará los insumos necesarios para las próximas campañas, esto hará que comience a retener trigo y maíz. Entonces subirán los precios de los productos derivados de trigo y maíz, esto implica leche y carne vacuna en el caso del maíz, y productos ligados al trigo como pan, pastas frescas, entre otros. A los tambos y feedlot esta medida los complica, al igual que al sector porcino y aves”.

Luego agregó, que “el Ministro de Economía soslaya que en la economía hay vasos comunicantes, un productor no solo tiene soja, produce otros cultivos, y si tiene beneficio para uno, tratará de guardar otros, lo que generaría menos oferta y estimamos que, si la demanda es constante, subirán los precios”, explicó Di Stefano. Por último, el analista ensaya una conclusión: “El dólar soja a $200 es una inconsistencia total, un mamarracho, que tendrá como resultado más inflación por la suba del trigo y el maíz, como también un aumento considerable en los pasivos monetarios del Banco Central por una mayor emisión de letras. Esto último traerá como resultado una suba de los dólares alternativos. Dólar rumbo a $ 400 para fin de año”.