El Cronista Comercial 26-05-2022 - Guillermo Laborda El mercado cambiario se mueve en función de las liquidaciones de la cosecha de soja, pero cada vez más en función de los pagos que tiene que hacer el gobierno en materia energética. En las dos primeras ruedas de la semana, se debieron pagar importaciones, gas licuado principalmente, por u$s 250 millones.

La semana pasada el INDEC informó los datos de la balanza comercial correspondiente a abril, lo que permite estimar en definitiva la cantidad de dólares que puede generar el intercambio de bienes. Un informe del JP Morgan del pasado 20 de mayo consignó que "el resultado comercial de abril sorprendió por la mejora, con u$s 1400 millones de superávit en el mes". Agrega que "el resultado mensual se basó en el robusto crecimiento de las exportaciones (47,3% interanual) pese a los incentivos en contra de los controles de capitales".

Ese crecimiento de las exportaciones se basa en un incremento de 24% en los precios, como resultado de los aumentos en los commodities tras la invasión de Rusia a Ucrania. El volumen de las exportaciones sólo creció un módico 9,6% interanual.

Pero del lado de las compras al exterior se observa a pleno el "efecto energía" y lo que le cuesta al Banco Central en materia de divisas. "Tanto el volumen como los precios de las importaciones mostraron fuertes aumentos en el mes de 24,5% y 17,9% respectivamente", concluyó el informe del JP Morgan. Las importaciones de energía están creciendo a un ritmo del 203%. El balance energético está mostrando un déficit de u$s 1700 millones en los últimos 12 meses.

De importar gas a exportarlo: el objetivo que une a las empresas y al Gobierno para asegurar dólares frescos

Por el momento las operaciones a futuro en el ROFEX no muestran señales de que el mercado espere saltos bruscos en el tipo de cambio. Pero lo cierto es que los operadores están pendientes en el día a día de cuántos dólares puede acumular hasta agosto el BCRA, los que le servirán para atravesar el desierto de divisas que se puede generar en los meses que restan del año.

Más que el cumplimiento de la meta de suma de reservas incluida en el acuerdo con el FMI, importa para el gobierno la capacidad de mantener al dólar oficial sin saltos importantes. Al fin y al cabo, un waiver del organismo internacional que preside Kristalina Georgieva siempre estará a mano bajo la excusa de la suba de precios internacionales de la energía tras la invasión de Putin a Ucrania.

La brecha cambiaria, ahora en torno al 75%, nuevamente es una espada de Damocles para la política económica de Martín Guzmán, con 18 meses por delante para cerrar su gestión como ministro de Economía de la actual administración. Lo cierto es que hoy, todo se mueve en el día a día en el Palacio de Hacienda, sin mayores horizontes.