Revista Puerto 19-04-2022 - Nelson Saldivia “El STIA atrasa”. La categórica afirmación pertenece al referente de la CAPIP, Damián Santos, al repudiar públicamente las manifestaciones y bloqueos de las plantas industriales por parte de dirigentes y afiliados del Sindicato de la Alimentación llevados a cabo días atrás en las pesqueras de Puerto Madryn.

“Estamos cansados de la mafia, que en una época tan delicada para todos los argentinos corta las exportaciones de un país, con total impunidad y violencia”, condenó el dirigente empresario al tiempo de instar a que “es hora que los políticos y la Justicia piensen en las próximas generaciones y no en las próximas elecciones”, reflexionó.

Santos planteó la necesidad de superar metodologías que nada han aportado a la actividad, sino por el contrario han sido causales de pérdidas de empleo. “Ahora en un mundo en guerra y una Argentina muy dividida la pesca sigue aportando trabajo genuino. Algunos todavía no entendieron el camino y buscan repetir la foto de empresas quebradas y trabajadores en la calle pidiendo subsidios”, criticó y a su vez advirtió: “esta vez no los vamos a dejar”.

El expresidente de CAPIP comparó dos formas diferentes de accionar que se observa en la actividad. “Hace tiempo que en Chubut mediante el diálogo se ha construido un sector pesquero unido, donde empresarios, trabajadores y Estado trabajan juntos día a día; coincidencia o no, fuera de este grupo están los que usan la violencia y las amenazas como único método de negociación”, reprochó.

No es la primera vez que desde ese sector sindical se adoptan medidas que paralizan o interrumpen la cadena productiva y comercial de la industria pesquera. “Otra vez una banda de delincuentes disfrazados de sindicalistas, sin razón y sin diálogo, pero con total impunidad bloquean accesos y amenazan a cada empleado. El STIA atrasa”, criticó.

El gremio de la Alimentación viene planteando que se modifique la legislación pesquera de Chubut, y que por la vía de una norma se obligue a las empresas a pescar y procesar otras especies, diferentes al langostino. Y que el personal eventual de temporada sea incorporado en forma permanente.

En este sentido, el dirigente de la CAFACh, Giuliano Vestuti, aportó sus impresiones a través de Twitter: “veo con preocupación algunas manifestaciones que entiendo están buscando las condiciones necesarias para generar una nueva Ley de Pesca, como si de forma mágica la redacción de artículos y leyes podría generar continuidad laboral para una actividad, que por sobre todo depende de la situación biológica (cronológica dentro del calendario) de recursos ictícolas y el entendimiento del procesamiento, situación comercial y coyuntural de cada especie”, razonó.

Al respecto, Damián Santos sostuvo que “la pesca de Chubut tiene la mayor cantidad de empleo registrado del país, y viene creciendo año a año gracias al trabajo silencioso de un montón de personas. ¿Se puede mejorar? Obvio que sí, pero desconfiemos de las soluciones mágicas que pondrán en peligro todo lo logrado”, sugirió ante una posible modificación unilateral de la legislación pesquera provincial.

Desde el STIA piden a los diputados que sancionen una ley de emergencia laboral, que establezca determinadas exigencias de empleabilidad, similares a las que se implementaron décadas atrás, y que a la postre terminó siendo declarada inconstitucional por la Corte Suprema de Justicia de la Nación.

Por su parte, el presidente de la CAFACh, Gustavo González, opinó que hubo, “soluciones mágicas que ya se utilizaron y generaron el peor momento del sector, con empresas cerradas que nunca más se pudieron recuperar y miles de empleados sin trabajo. La única solución es el trabajo responsable de todas las partes”, recomendó, en un contexto en que no hubo acuerdo entre la flota amarilla y el SOMU, por lo que no se podrá salir a pescar merluza en aguas provinciales que abastezcan a las plantas de procesamiento.
puerto