La Nación 09-03-2022 - Fernando Bertello SAN NICOLÁS.- La guerra en Ucrania tiene preocupados a los fabricantes de maquinaria agrícola porque la región en conflicto venía siendo un destino creciente para las ventas de equipos de las empresas argentinas.

El tema es uno de los que está en la agenda del sector, según contaron a LA NACION Eduardo Borri, presidente de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma), y Luciana Mengo, presidenta de la Asociación de Fabricantes de Maquinaria Agrícola y Agrocomponentes (Afamac) de Córdoba. Del impacto de la guerra, entre otros temas, se habla en Expoagro Edición YPF Agro, la muestra que comenzó hoy en esta ciudad y se hará hasta el próximo viernes.

Según precisó Borri, el año pasado las exportaciones del sector se ubicaron en 80 millones de dólares. De ese valor, un 20% correspondió a ventas realizadas a Rusia, Ucrania, Bielorrusia, además de Kazajistán.

Esos mercados demandaban cabezales maiceros, sembradoras, pulverizadoras, enfardadoras, embolsadoras, entre otros productos. Vale recordar que Rusia y Ucrania conforman un polo importante en materia de trigo, ya que juntos estos países proveen el 28,5% del comercio global. Además, representan el 78% del comercio internacional de aceite de girasol.

“Cambió el escenario, de la pandemia a la guerra”, coincidieron la presidenta de Afamac y el titular de Cafma. “No sabemos qué va a pasar con las exportaciones”, agregó Mengo. Borri dijo sobre la región en conflicto: “Era un destino creciente”. Detalló que en el caso de una sembradora desarrollada para un suelo específico como el de Ucrania ahora no es simple una reubicación del producto.

“Esta situación de conflicto Rusia-Ucrania es parte de la coyuntura. No debería tomarse como algo que está para quedarse. Uno desea que termine rápido”, dijo el presidente de Cafma.
Empleo

El sector de la maquinaria agrícola es un rubro que, salvo un parate de 12 días, pudo seguir trabajando durante la pandemia. En 2019 tenía unos 26.500 empleos y ahora cuenta con unos 37.000 a 38.000.

“Se incrementó el personal un 20% por año”, apuntó Borri. El presidente de Cafma, que espera un buen 2022 en ventas, indicó que en los últimos dos años “todas las empresas incrementaron su producción”. Remarcó: “El sector está activo”.

En este contexto, mientras en un momento la demanda iba detrás de la producción, ahora es la producción quien tomó la delantera y, en este sentido, se fueron acortando los plazos de entrega de los equipos solicitados por los productores.

La presidenta de Afamac indicó que el sector tiene necesidades que deben ser atendidas. “Está la percepción de que nuestro sector no necesita nada”, dijo la dirigenta. Luego detalló que la actividad requiere que no falte materias primas, esto es insumos, poder capacitar al personal y contar con financiamiento.

“Hay que mantener los créditos y dirigirlos. Necesitamos que los créditos subsidiados por los argentinos sean para garantizar el producto argentino”, indicó Borri.

Respecto de este tema, los fabricantes nacionales vienen impulsando una ley para la maquinaria agrícola. Pretenden que se defina qué se entiende por producto nacional y luego eso pueda ser usado para los créditos.

Para Borri, se puede empezar a considerar un 40% de producto nacional, esto es el equipo con componentes locales, para que luego se pase a “como mínimo un 50%”.
Fernando Bertello