Revista Puerto 25-02-2022 - Nelson Saldivia Un reclamo que se reitera por tercer año consecutivo en el puerto del sur chubutense y que tiene que ver con la falta de regularidad en la actividad de estibaje ante el reducido número de barcos pesqueros que operan en Comodoro Rivadavia, volvió a ser motivo de reclamos por parte de trabajadores enrolados en el SUPA.

Esta semana volvieron a manifestarse para que las autoridades les garanticen continuidad laboral en una actividad que depende de diferentes variables que hace que las armadoras opten por uno u otro puerto para realizar sus desembarques. Se quejan que algunas plantas locales se abastecen con materia prima que llega vía terrestre y prometen bloquearle el ingreso de camiones, lo que lejos de solucionar su problemática, dejará a otros trabajadores sin actividad dentro de las fábricas.
En el séptimo lugar

El puerto de Comodoro Rivadavia se ubica en el séptimo lugar del ranking de descargas pesqueras marítimas del país. El año pasado se desembarcaron capturas por apenas 18.075 toneladas, quedando por detrás de Mar del Plata, Puerto Madryn, Rawson, Puerto Deseado, Ushuaia y Caleta Paula.

De ese total de 2021, en el muelle Antonio Morán se descargaron 2.752 toneladas de calamar, 3.286 toneladas de langostino y 11.760 toneladas de merluza hubbsi S41. Justamente, es en Comodoro Rivadavia casi en el único lugar de Chubut donde se procesa merluza, salvo excepciones.

Con todo, estos datos evidencian que no se trata de un puerto con incidencia fuerte en desembarques pesqueros y de allí que la estiba no tenga regularidad en su actividad.

Si bien se había hecho un acuerdo para que determinados barcos ingresen y descarguen allí, cuando la ecuación no es rentable, las capturas van a otros puertos.
Reclamo recurrente

En este contexto, el dirigente local del SUPA, Salvador Cuenca, sostuvo que “el puerto tiene actividad en las plantas y no en el muelle. El producto que llega, llega por tierra. Reclamamos lo mismo que el año pasado y esto sin una solución definitiva se va a repetir”, dijo durante la protesta.

“Somos trabajadores eventuales y sin actividad no tenemos ingresos, necesitamos actividad continua”, planteó a la espera de que el Estado les dé una respuesta.

Cuenca reconoció que “en enero tuvimos bastante trabajo y ahora los barcos se van a Caleta y Camarones y hacen luego el traslado por transporte terrestre. Meses atrás firmamos un convenio con el compromiso de que haya cinco barcos trabajando en la ciudad, nunca se cumplió y ahora teníamos dos”, manifestó al indicar que se trata de 82 familias que dependen de la actividad.
Comodoro no es una alternativa

En tanto, la flota potera concentra sus operaciones en el puerto santacruceño de Puerto Deseado y algunas optan por Puerto Madryn, ante la insuficiencia de capacidad de frío en el primero. Pero Comodoro Rivadavia no es una ‘alternativa’ ya que no hay regularidad de ingreso de portacontenedores para exportar, y además porque han tenido experiencias no satisfactorias con la estiba local, según refieren los empresarios del sector potero.

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