Revista Puerto 03-11-2021 - Roberto Garrone El aumento de cargas de filet de merluza rechazadas en la frontera brasileña por cuestiones vinculadas con presencia de parásitos, problemas de rotulado y en la confección de los certificados sanitarios puso en alerta a los frigoríficos exportadores de Mar del Plata, desde donde salen la mayoría de los camiones con destino al país vecino.

La semana pasada hubo un encuentro virtual entre técnicos de ambos países del que tomó parte Fabián Ballesteros, coordinador General de Pesca de SENASA, junto con el agregado Agrícola Comercial argentino en Brasil, Javier Dufourquet.

“El avance que tuvimos fue la apertura del diálogo”, resumió el Coordinador ante la consulta de este medio. “Brasil reconoce que aumentaron sus controles y fiscalizaciones dentro de una campaña más intensa que tiene como objetivo controlar el 60 por ciento de las importaciones de productos pesqueros que ingresan por su frontera”, precisó Ballesteros.

De acuerdo al registro que lleva el DIPOA, el organismo sanitario brasileño, fueron 25 las cargas rechazadas por presentar un alto nivel de parásitos en las muestras realizadas en la frontera.

“Ellos dicen que no es un número elevado y tiene ese contexto de aumento de la fiscalización para justificarlo, pero obviamente que del lado argentino la sensación es otra y es comprensible porque es imposible erradicar los parásitos en una especie salvaje; habría que desparasitar el mar argentino”, remarcó el Coordinador, que reconoció que las notificaciones de parásitos desde Brasil corresponden a merluza y alguna especie de agua dulce como la tararira.

Desde SENASA insistieron en todos los controles que se realizan a los productos pesqueros en origen, es el mismo producto que se exporta a destinos como Estados Unidos y países de Unión Europea y plantearon la necesidad de fomentar el diálogo bilateral para buscar una solución conjunta por el tema parásitos.

“Nosotros recomendamos que Brasil realice campañas de divulgación en que expliquen que el pescado salvaje tiene parásitos. No se puede medir la repugnancia que genera un filet con parásitos. Ese es el principal problema: cuántos son pocos, cuántos son tolerables, cuántos son muchos. Depende de cada persona. Por eso es tan complejo encontrar coincidencias”, reconoce Ballesteros.

Sobre los casos denunciados desde Cafrexport, la cámara que agrupa a los frigoríficos exportadores de Mar del Plata, sobre carga rechazada por una mala rotulación o por la posición de un sello en un lugar distinto al que en Brasil consideran correcto, el Coordinador de SENASA evitó pronunciarse por estar fuera de su incumbencia.

Sí aclaró otro cuestionamiento de los exportadores marplatenses sobre las demoras adicionales que se generan en la carga rechazada en la frontera brasileña. “Los tiempos dependen de las consignaciones que hayan hecho en Brasil. Si debe retornar a origen debemos certificar que se trata de la misma mercadería y se trata de agilizar todo lo que se pueda para liberarla”.

Ballesteros reconoce que no hay fecha para próximas reuniones pero que siguen trabajando para minimizar los rechazos en la frontera. En tanto desde los frigoríficos marplatenses descreen que la solución pueda llegar desde la concordia sanitaria de ambos países y ya pidieron la intervención directa del embajador en Brasil, Daniel Scioli.
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