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El Cronista Comercial 21-04-2021 - Carlos Boyadjian Para muchos productores la publicación en el Boletín Oficial de la Resolución Conjunta 3/2021 de los ministerios de Agricultura y Desarrollo Productivo fue un virtual corte de puentes de parte del Gobierno.
Es que la norma que obliga a los exportadores de todas las carnes (carne fresca, refrigerada o congelada, tanto sea bovina, porcina, ovina, caprina, equina y aviar) a presentar una declaración jurada ante la Dirección Nacional de Control Comercial Agropecuario (DNCCA), llega menos de 24 horas después de que se impusieran nuevos requisitos a las exportaciones de carne vacuna, granos y lácteos (Resolución 60/2021).
En este contexto, la Comisión de Enlace de Entidades Agropecuarias (CEEA) emitió un comunicado en el que las cuatro organizaciones que la conforman - Sociedad Rural, Confederaciones Rurales Argentinas, Coninagro y Federación Agraria- se declaran en "estado de alerta", y sostienen que esto "abre un tiempo de consulta con nuestras bases".
El argumento central es que las últimas medidas fueron inconsultas, desoyendo la promesa que oportunamente les había hecho a los dirigentes del campo el propio presidente de la Nación, Alberto Fernández, de conversar ante cualquier medida que tuviera alto impacto en el sector. Por ello, consideran con estas últimas medidas sobrevino una ruptura del diálogo.
La consulta a las bases presagia una posible escalada de la pulseada entre el Gobierno y el campo, habida cuenta de la experiencia de la Resolución 125 en 2008. En ese momento, las bases forzaron los cortes de ruta y medidas de fuerza en numerosas localidades del país,
Las entidades agropecuarias recuerdan que la semana pasada, al trascender algunas medidas que el Ejecutivo estaba trabajando hacia el sector, pidieron audiencias con las carteras de Agricultura, Desarrollo Productivo y Economía, sin resultados.
La semana pasada, las entidades del campo pidieron audiencias con las carteras de Agricultura, Desarrollo Productivo y Economía, hasta el momento sin resultados
La respuesta vino en forma de normativas que establecen nuevas exigencias a los exportadores (Registro Único de Operadores de la Cadena Agroindustrial-RUCA, Declaración Jurada de Operaciones de Exportación de Carne- DJEC) y que, según palabras de los productores, "recuerdan a los nefastos ROE, por medio de los cuales se restringían y direccionaban discrecionalmente las exportaciones de bienes de origen agropecuario, y causaron un daño irreparable a la producción".
En este contexto, desde la Mesa de Enlace sostienen que "no existe un compromiso real de diálogo, ni tampoco se busca articular consensos por parte del Gobierno nacional, en pos de generar desarrollo productivo, social y económico", con políticas hacia un sector que genera dos de cada tres dólares (65%) que ingresan al país por exportaciones.
La Resolución 60/2021 (RUCA) y la Resolución Conjunta 3/2021 (DJEC) son los últimos eslabones de una saga que comenzó en enero con amenazas a cerrar las exportaciones de maíz y siguió al poco tiempo azuzando la idea de subir las retenciones a la soja, el trigo y el maíz, los tres principales cultivos del país.
Días más tarde, los frigoríficos exportadores de carne vacuna debieron sentarse en la mesa para terminar acordando entregar 8 cortes populares a precios rebajados en 30% para el mercado interno, y ahora llegan los controles a través de declaraciones juradas, registros y documentación, sin la cual no se autoriza la exportación.
Una segunda lectura, también invita a pensar que bajo el argumento de la defensa de la "mesa de los argentinos", el Gobierno profundiza la pelea con el campo, al elegirlo como enemigo, culpándolo de la inflación, en un escenario de aceleración de los precios y con el calendario electoral en vista.
Es una película que los argentinos ya vieron hace más de una década, con los resultados conocidos, la pérdida de 10 millones de cabezas de ganado en apenas unos años.
Se sabe, cuando no hay precio y condiciones para desarrollar una actividad, la variable de ajuste siempre es la oferta. Precio por cantidad, o P x Q, como dice la teoría económica. |
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