El Cronista Comercial 22-02-2021 - Carlos Boyadjian En las últimas semanas, acompañando las precipitaciones que cayeron en vastas regiones del país, cambió el humor de los productores agropecuarios, que veían cómo la falta de lluvias podría afectar los rindes de los principales cultivos y dejarlos afuera del reparto de los mejores precios de las commodities agrícolas en siete años.

Las últimas estimaciones de cosecha de la Bolsa de Comercio de Rosario ubican la producción de soja en 49 millones de toneladas y la de maíz en 48,5 millones, algunos escalones por encima de las estimaciones de principios de mes y sólo 3,4% y 5,8% respectivamente en relación a la campaña 2019/2020.

La Bolsa de Cereales de Buenos Aires tiene una estimación de cosecha de 46 millones, tanto para soja como para maíz, mientras que el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) estima que en soja Argentina llegará a 48 millones de toneladas (-1,6%) y maíz a 47,5 millones (-6,9%).

Con estas previsiones, la cosecha de los principales cultivos (soja, maíz, trigo, cebada, girasol, sorgo y maní) de la campaña 2020/21 podría rondar los u$s 44.000 millones, un 33% por encima de la cosecha anterior, u u$s 11.000 millones más.
La cosecha de los principales cultivos podría rondar en la campaña 2020/21 los u$s 44.000 millones, un 33% por encima de la cosecha anterior, algo así como u$s 11.000 millones más

Sería un récord histórico e incluso superaría el nivel alcanzado durante la campaña 2010/11, que trepó a los u$s 42 millones.

De ese total se exportarían u$s 33.900 millones, un 34% más que en la campaña precedente. No es un dato menor para una Argentina necesitada de dólares.

Esto sin contar el impacto que puede tener a nivel de retenciones, donde al día de hoy la soja (grano) tributa un 33% del valor exportado, los derivados de soja (harina, aceite, pellets) el 30%, mientras que trigo y maíz dejan en las arcas del Estado el 12% del valor de exportación.

Un informe del IERAL de la Fundación Mediterránea señala que "dada la mejora del clima y la fuerte suba de precios internacionales, el valor de la cosecha y el aporte de agro dólares deben incrementarse este año", sin embargo, la pregunta clave es en cuánto crecerá.

Juan Manuel Garzón, economista jefe del IERAL y autor del informe, recuerda que el año arrancó con muy buenos precios, los mejores en siete años.

"El precio FOB de la soja en puertos argentinos promedió u$s 557 y u$s 543 toneladas en enero y la primera quincena de febrero, respectivamente", y señala que "hay que retroceder hasta los años 2013 y 2014 para encontrar valores tan altos y, con respecto al año pasado, hay una diferencia de casi u$s 200 más por tonelada (+55%)".

Tomando varios escenarios de análisis, que incluyen cinco estimaciones de volúmenes de producción y tres de precios de los principales granos (soja, maíz y trigo) el escenario base determina que la cosecha llegaría a u$s 44.000 millones con valores de la soja de u$s 500 la tonelada.

En el caso del maíz se estima un precio promedio de u$s 230 la tonelada y en el trigo (ya cosechado) de u$s 260 dólares por cada tonelada.

Un escenario más optimista elevaría el valor de la cosecha hasta los u$s 52.000 millones, mientras que en un horizonte de menor producción por impacto de los factores climáticos en los rindes o precios que empiecen a jugar a la baja, tendría un piso de u$s 37.000 millones.