Revista Puerto 23-10-2020 - Nelson Saldivia El intendente de Puerto Deseado, Gustavo González, justificó la decisión de paralizar la actividad portuaria hasta el viernes ante una escalada de contagios por coronavirus en la localidad santacruceña, pero sugirió que hubo estibadores que concurrieron al puerto a pesar de contactos estrechos de infectados por la pandemia.

El jefe comunal brindó declaraciones a través del área de comunicación del municipio donde lamentaba que algunos trabajadores oculten la información, e incluso que, según unos audios circulantes en el pueblo, “algunos decían que iban a trabajar, por más que hayan tenido contacto con casos positivos”. “Por eso esta decisión de hacer un parate en todo lo relacionado con la actividad portuaria”, argumentó González.

El viernes se volverá a evaluar la situación epidemiológica y para ese momento ya se tendrá en detalle la información sanitaria que no contaba el puerto respecto a quienes son contactos estrechos y deben cumplir con el aislamiento obligatorio.

Afirman que algunos estibadores ante la acuciante situación económica no querían perder ni un solo jornal, teniendo en cuenta que la actividad pesquera ha terminado en la zona de veda de merluza y la flota que queda operando está sobre el 41º tras lo cual, cada embarcación retornará a puerto para su última descarga de la temporada.

No obstante, en Puerto Deseado se espera un cargamento importante de cemento, que la estiba no quiere resignar a pesar de la delicada situación sanitaria de la localidad, y ante la aparición de casos concretos entre los estibadores.

Se trata de una decena de contagios que se registraron entre trabajadores que operan en el puerto, lo que implica que hay otros tantos considerados ‘contactos estrechos’ por lo que desde el punto de vista sanitario son considerados sospechosos de tener el virus, a pesar que sean asintomáticos.

El directo del puerto Jorge Fresco señaló que la medida fue adoptada por el Centro Operativo de Emergencia (COE) para reordenar la actividad y minimizar los riesgos de continuar con la cadena de contagios de Covid-19. “Se empezó a desbordar la situación y Deseado es un pueblo chico. Se han detectado varios casos en el ámbito de la estiba y lamentablemente hay estibadores que están poniendo por encima de la responsabilidad social una cuestión económica por necesidad”, expresó.

“Necesitamos frenar el ingreso de las personas que deben cumplir con aislamiento obligatorio, pero igualmente estaban viniendo al puerto. Al tener la información oficial que provea el Ministerio de Salud podemos tener un control efectivo en el acceso al puerto”, precisó Fresco.

“Hay gente que está aislada porque se presume que puede ser positivo, pero están viniendo igual poniendo en riesgo a todo el resto, por eso necesitamos tener las identidades para restringir su acceso”, lamentó el titular del Puerto por la situación que se presentó.

“El gremio manifiesta que ellos tienen la necesidad de trabajar. Fue una zafra de langostino bastante compleja para Puerto Deseado porque el recurso estuvo muy al norte, y las empresas priorizaron la logística de los puertos más cercano a la zona de extracción del recurso”, describió sobre los altibajos que tuvo ese puerto santacruceño en la atípica temporada de langostino en aguas nacionales.