Ambito Financiero 11-10-2019 - Susana Merlo … que, mientras el clima sigue complicando el presente del trigo (que se aleja cada vez más de los 21 millones de toneladas, que se preveían hace un par de meses) y también el futuro de los granos gruesos, en especial girasol y maíz de segunda, debido a la falta de lluvias regulares que compensen los déficits hídricos de los últimos meses, se siguen sucediendo reuniones del más distinto tenor de dirigentes con funcionarios actuales y algunos que se promueven ya a futuro e, incluso, entre los propios dirigentes. Es que la “grieta” política parece ser lo único que efectivamente “derramó” y la conmoción económica y financiera que sacude al país hace ya dos meses, no ayuda a atenuarla. Así, a la sucesión de “visitas” presidenciales (con ministros, por supuesto), y de gobernadores, se sumaron varias de los candidatos de la oposición, aunque de estas, una de las que más revuelo provocó en el sector agroindustrial fue la que se llevó adelante para avanzar en un supuesto plan contra el hambre que, por los trascendidos, se superpone con planes públicos y privados ya en marcha, y que por lo que se sabe, no ofrece mayores novedades, excepto que vuelve a recaer sobre el sector agroindustrial que no pasa, justamente, por su mejor momento, al punto que varias plantas alimentarias están adelantando vacaciones a sus empleados. Tanto así que el lanzamiento público/político se hizo en la emblemática Facultad de Agronomía. Y, dados los antecedentes del anterior período cuando gobernaba Cristina de Kirchner, ahora candidata a vicepresidenta, los empresarios del sector comenzaron a movilizarse rápidamente.

… que en parte por esto, pero también por otras diferencias (algunas muy viejas…), se realizó en la Bolsa de Rosario una nueva megarreunión de dirigentes y empresarios del comercio, la industria y la producción para consolidar posturas y reclamos, de uno de los sectores más fuertes y dinámicos de la economía. Como en otros sectores, se entiende que es necesario “unificar” posiciones y fortalecer las alianzas para que no sea tan fácil la división, como ocurrió durante buena parte de lo que va del siglo. De hecho, la mayoría de los participantes coincide en que la capacidad de “lobby” de la agroindustria es muy inferior a la de otros sectores que aportan mucho menos al fisco, a la balanza comercial, y hasta como tomadores de mano de obra. Y, si bien ya hubo acercamientos notables, como el que se dio recientemente de las 7 Bolsas que operan con productos agropecuarios en el país, los intereses sectoriales son variados y en algunos puntos hasta contrapuestos, lo que implica vencer un escollo más. Sin embargo, parece que son las cuestiones personales las más difíciles de dirimir, y ahí se menciona lo que estaría ocurriendo con la Mesa de Enlace Agropecuaria (que no hay que olvidar que se formó a partir del embate por las retenciones móviles en 2008), que reúne a las 4 entidades nacionales del campo, pero que ahora estaría soportando un dura fricción interna que todavía no llega a nivel público. Pero, lejos de darse entre lo que podrían ser los extremos del arco de productores, o sea, la Sociedad Rural y la Federación Agraria, parece que ahora el disenso se plantea no entre las entidades, sino entre los conductores de Coninagro, el cooperativista mendocino Carlos Ianizzotto y el ruralista bonaerense, ex Carbap y ex IPCVA, Dardo Chiesa, que hoy preside CRA, con epicentro en las pretensiones políticas de cada uno de ellos, tema que deberá ser zanjado la hora de lograr un frente común.

… que también en el Yatch de Puerto Madero, donde se realizó la edición 19ª del almuerzo de Solidagro, que ahora preside Rolo Freers, secundado por Alberto Padoán, de la Bolsa de Rosario, y Héctor Laurence, los temas obligados fueron los políticos, en especial, los más relacionados con el campo. Y si bien en el oficialismo ya se conocen las fortalezas y las debilidades, en la oposición todos los días aparece alguna propuesta nueva (medicamentos, hambre, precio de alimentos, etc.), sin que casi ninguna de ellas haya logrado aún la bendición oficial del candidato Alberto Fernández. En más de un caso, parecen descabelladas, o probadamente fracasadas y que, en realidad no queda claro si le aportan, o le restan adhesiones. Tampoco se aclara todavía de donde saldría el fondeo para esos planes, aunque entre los agropecuarios se teme que la presión fiscal sobre algunos sectores, como el campo, será uno de los ejes, aunque por la rentabilidad actual de las actividades, esta posibilidad está sensiblemente acotada. Pero también hubo otros temas como la incidencia del costo del combustible en el costo total de la actividad que es clave en el agro y que según los transportistas, supera el 36% promedio. Pero también hubo varias a favor como el acuerdo a largo plazo que celebró E-Grain Specialties, con la Cooperativa Agraria Agroindustrial, la maltería más grande de Brasil, para exportar cebada maltera, con Trazabilidad. Desde la empresa, que hoy en día cuenta con su propia terminal portuaria ubicada en Quequén, comentan que los convenios de siembra, el seguimiento de cultivos, el almacenaje segregado, la logística diferencial y la certificación de sus procesos, es lo que les permite cumplir con la actual demanda de “seguridad alimenticia”, conocida como Food Safety. También, la puesta en marcha de otro nuevo mercado de futuros en Rosario, en este caso para la ascendente actividad de carne de cerdo, fue bien recibida. Y lo mismo ocurrió con la noticia de un nuevo crecimiento en los volúmenes transportados por ferrocarril, que ya triplican los mensuales de hace 4 años atrás gracias a las mejoras en material rodante y en vías, como las del estratégico Belgrano Cargas entre Salta y Rosario, que ya recuperó unos 800 km de un plan de 1.700
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