La Razón - 30-09-2019 - Fernando Gregalio De acuerdo con el último informe de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, la falta de lluvias continúa afectando a gran parte del área productiva nacional. Actualmente, de las 6,6 millones de hectáreas implantadas con trigo a lo largo del país, un 3,6% se encuentra transitando etapas de llenado y un 47,5% aún no supera el macollaje. De todas formas, un 82,5% mantiene una condición de cultivo de normal a excelente, y el estado hídrico entre regular y sequía se eleva al 22,5% del total.

Ante este panorama, el Ing. Agr. Antonio Martín, de la agencia local del INTA, expresó a LA RAZON que “similar situación a la del trigo se observa para el cultivo de cebada, con el agravante de que gran parte de los cuadros comienzan a transitar etapas reproductivas. Parte de las 950.000 hectáreas implantadas en el presente ciclo se encuentran desarrollándose bajo reservas hídricas de moderadas a regulares en los perfiles, lo cual podría impactar en el rinde potencial”.

“En el transcurso de la última semana, sin lluvias, la condición de cultivo regular a mala subió 2,6 puntos porcentuales, de la mano de una caída en la condición hídrica de los suelos. Hacia el norte del área agrícola, donde el inicio de cosecha se estima para mediados del mes que viene, la ocurrencia de lluvias ya no tendría impacto. Sin embargo, hacia el sur de la región, aunque el cultivo no manifiesta signos de estrés gracias a las bajas temperaturas, la falta de lluvias podría amenazar la generación de rendimiento. La condición de cultivo se encuentra entre normal y buena en más del 70% del área, acompañada de una humedad entre adecuada y óptima en alrededor del 80 % de los casos”.

“Por último, hacia el sur del área agrícola, el cultivo presenta mayores demoras, con una deficiencia hídrica más marcada. No obstante, gracias a las bajas temperaturas (fuertes heladas), el cereal no se muestra estresado pero requiere de lluvias urgentes antes de que las temperaturas comiencen a incrementarse. En nuestra zona, en general el cultivo presenta una buena condición, aunque los lotes sembrados temprano ya están comenzando a encañar, iniciando el período crítico de definición del rendimiento, por lo cual es urgente la recarga de humedad en el suelo que acompañe la evolución del cultivo. Los cultivos sembrados más tarde, del 15 de Julio en adelante, por las bajas temperaturas presentan un menor desarrollo y cierto atraso en su ciclo. Con respecto a las enfermedades, las mismas no han prosperado demasiado, pero no debe descuidarse su monitoreo, sobre todo durante el mes de octubre, cuando el trigo transite el período de prefloración y floración.



Lluvias y heladas

Con respecto a los últimos registros de lluvia, para la zona de Chivilcoy han sido de muy baja magnitud, de tan solo 6 milímetros en julio, 9 milímetros en agosto y 5 milímetros en lo que va de setiembre. “No hay antecedentes en años cercanos de una situación similar. Debemos irnos al año 1995 (fuente Marcelo Speranza) con 6 milímetros en julio, 4 en agosto y 11 en septiembre. Ese año, en el mes de abril habían precipitado 400 milímetros, mientras que ahora, en 2019, el acumulado anual es de 571”.



“El tema heladas también merece tomarse en cuenta. Analizando los registros de las temperaturas mínimas durante el periodo invernal en las últimas 5 campañas (datos tomados de la Estación meteorológica automática del Criadero Klein, en Pla, partido de Alberti), podemos observar que en el transcurso de este año 2019, se ha registrado la mayor cantidad de días con heladas, 25 en total, sobre 15 que se registraron en los años 2018 y 2016”

“De la misma manera, también en este año 2019 se tiene el registro de la menor temperatura mínima registrada, con 5.8 grados bajo cero, el día 6 de julio del corriente año. Comparando las últimas 5 campañas, se puede observar que el invierno menos frío ha sido durante el año 2017, cuando solamente se registraron 8 días con temperaturas por debajo de cero grado y 3 días con temperaturas entre 0 y 1 grado sobre cero”.