Revista Puerto 25-03-2019 - Nelson Saldivia El viernes por la noche, los marineros del buque congelador Promarsa III soltaron amarras del muelle Comandante Luis Piedra Buena de Puerto Madryn y emprendieron rumbo hacia Necochea. Uno de los barcos pesqueros de la emblemática Alpesca volvió a navegar después de casi seis años de haber quedado inactivo. Zarpó con una tripulación compuesta por cinco marineros, oficial de máquinas, jefe de máquinas y el capitán.

La empresa Red Chamber Argentina lo tiene a su cargo y tras realizarle una serie de reparaciones y adecuaciones logró obtener un certificado de navegabilidad de la Prefectura Naval; el tangonero fue despachado hacia el puerto bonaerense de Necochea, donde ingresará a dique seco para su puesta a punto para retomar la actividad comercial.

En el muelle se vivió un momento emotivo al soltarse las amarras y la tripulación fue despedida por marineros de la ex Alpesca que ahora están bajo relación de dependencia de Red Chamber. Está más cerca la posibilidad de volver a pescar, tras largos años de lucha de los trabajadores que realizaron guardias y custodiaron la embarcación siempre con la esperanza de que un día volvería a navegar.

El Promarsa III es un buque congelador tangonero de 38 metros de eslora que podría volver a lanzar redes en el segundo semestre del año, ya que las reparaciones en dique seco demandarían algo más de dos meses.

Asimismo, RCA tiene previsto reparar y volver a poner operativos a los tres buques de la ex Alpesca que están a flote. Además de este barco, están el Promarsa I y el Cabo Vírgenes en Mar del Plata. Y respecto de los buques varados en Puerto Madryn, Cabo Buena Esperanza, Cabo Dos Bahías, Promarsa II y Cabo San Sebastián, que se encuentran en situación de irrecuperables, Red Chamber inició gestiones para realizar los reemplazos con otros buques.

El marinero Javier Monroy estuvo en el muelle Piedra Buena cuando el Promarsa III salía rumbo a Necochea y destacó que “es un logro verlo nuevamente navegar después de cinco años de espera, y lucha con el gobierno para que libere el barco. Fueron cinco años de mucho trajinar, pasaron muchas cosas en ese tiempo. Llegamos a cortar rutas, ir al Banco a reclamar que nos paguen y recibir una balacera de balas de goma, pero siempre seguimos adelante”, subrayó.

Monroy no duda en señalar que “los entonces representantes del SOMU, Horacio Trezza y Jorge Reyes, nos traicionaron. A diferencia del STIA, pasaron muchos años para que los marineros pasaran a la nueva empresa que se hizo cargo de Alpesca”.

“Esta fue una lucha que la hicimos a pulmón y hoy ver que el barco vuelve a navegar y que en dos meses puede estar pescando nuevamente es una gran satisfacción”, contó a REVISTA PUERTO. “Los dos años que estuve como interventor del SOMU me ayudaron para aprender como enfrentar a los políticos y la burocracia estatal. Le dediqué mucho tiempo a esta lucha, y hasta me costó haber perdido las elecciones en el sindicato, porque no me dediqué de lleno”, reflexionó.

“No tenía ningún padrino tampoco, pero sirve de experiencia. Valió la pena; hoy pertenecemos a Red Chamber los marineros que estábamos en la guardia”, valoró. La empresa incorporó 16 marineros y prevé tomar otros 10 cuando esté en condiciones de salir a la pesca.

Javier Monroy sostuvo además que “desde que empezamos a tratar directamente con Marcelo Mou, las cosas empezaron a funcionar. La empresa ha demostrado que quiere seguir generando trabajo. Si sale el reemplazo de los barcos varados en la costa va a ser un paso importante, porque muchos de los marineros de Alpesca podrán volver a recuperar su lugar de trabajo. Sería muy importante para nosotros y para la ciudad de Madryn, porque son muchos los puestos de trabajo que se recuperarían y hacen mucha falta en estos tiempos”, manifestó.
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