Los Andes 11-03-2019 - Bárbara Del Pópolo “Echarle la culpa al otro, por lo general sirve para esconder las propias falencias ”. Así se despachó contra la industria vitivinícola Alfredo Cornejo en su último mensaje como gobernador en el desayuno de la Coviar. Ante un discurso crítico que expresó Ángel Leotta, como representante de la Corporación, el mandatario acusó al sector de ser “autoreferencial” y de no tener una visión clara de por qué arribaron a una nueva crisis.

El evento comenzó con el discurso de Leotta, quien señaló que la crisis que padece la vitivinicultura, producto de la caída del consumo interno, las altas tasas del sistema financiero y los excedentes vínicos, “dejará viñedos en ruinas, empresas que no seguirán trabajando y heridas en el tejido social”. Ante esto señaló que el reclamo es un país seguro para producir y generar trabajo.
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“Transitamos por una situación de gravedad, cuyos síntomas son la caída de ventas en el mercado interno, la acumulación de stocks que inciden negativamente en el precio de la uva y del vino y la baja rentabilidad de toda la cadena. La explicación sigue siendo la misma de años atrás: la inflación y el estancamiento económico”, sostuvo.

Continuando con su discurso, el presidente de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar), pidió a los legisladores, gobernadores y funcionarios nacionales presentes su ayuda para elevar los montos de los reintegros a la exportación, quitar retenciones y alcanzar acuerdos internacionales similares a los que tienen sus competidores.
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La respuesta de Cornejo

A su turno, el gobernador Cornejo respondió a los reclamos de Leotta y de la vitivinicultura en general. “Las reformas que necesita la vitivinicultura requieren de consenso y de acciones. Hoy el sector se encuentra atravesado por discursos autoreferenciales que repelen una visión sistémica y nos impiden llegar a soluciones de conjunto. En síntesis, echarle la culpa al otro sirve para esconder las propias falencias y acusar al resto de los actores de los problemas que tenemos”, declaró.

“Esto se ve representado en que no hay un diagnóstico común en el sector acerca de la crisis. Solo hay diagnóstico común sobre la caída consumo en el mercado interno, pero sobre de las causas de ese decaimiento del mercado interno, los productores y los bodegueros difieren sobre qué originó esos problemas. Si no conocemos adecuadamente el diagnóstico, difícil será encontrar la cura”, apuntó el mandatario provincial.

“Es por eso que las instituciones que agrupan a los actores de la cadena deben redoblar el esfuerzo y tener la osadía de encarar las reformas necesarias para poner al sector de pie”, agregó Cornejo.
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El gobernador de Mendoza también destacó las decisiones que ha tomado su administración para favorecer a la vitivinicultura. Se refirió principalmente al plan plurianual vitivinícola, que apunta a la estabilización del mercado y para el que se destinarán $ 4.000 millones en cuatro años (Fondo Anticíclico).

Por otro lado, remarcó la lucha contra el granizo y las plagas, la reconversión de varietales (que apunta a reconvertir 5.000 hectáreas), y las líneas de crédito para cosecha y acarreo. “El esfuerzo del Gobierno de Mendoza se centró en poner a disposición de productores y establecimientos vitivinícolas más de $ 1.000 millones para cosecha, acarreo y elaboración. Por otra parte, se bonificó la tasa de interés, al bajarla de 60% a 27%, que es la que hoy está disponible. Además, se inició el operativo de compra de uva para mosto con el objeto de incidir sobre el precio de la uva base, buscando elevar el precio pagado al productor”, señaló.
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Presencia nacional

El secretario de Agroindustria de la Nación, Luis Miguel Etchevehere, respondió a las críticas por las retenciones (el derecho a la exportación que obliga a los productores primarios a pagar $ 4 por dólar exportado y a aquellos con mayor nivel de elaboración, $ 3 por cada dólar).

El funcionario consideró que se trata de un impuesto “incómodo” pero necesario para en el contexto de crisis actual, y reafirmó el compromiso de que será retirado en 2020.

No hubo anuncios. Tanto el Gobernador como el secretario de Agroindustria hicieron un recuento de las acciones que se tomaron en pos de la vitivinicultura, en la mayoría de los casos (a excepción de la baja impositiva provincial), como parte de un esfuerzo conjunto entre ambas administraciones y el apoyo del Banco Nación.
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Provincia anfitriona

Además de los referentes del sector vitivinícola de la provincia, y los funcionarios nacionales, los eventos vendimiales de Mendoza reúnen a todos los referentes del vino argentino. Durante el desayuno también estuvieron el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales y su par de Salta, Juan Manuel Urtubey. Ambos se refirieron a la crisis actual y llamaron a tener una “mirada estrategia” para fortalecer al sector.

No estuvo presente el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, quien se encuentra en Canadá en una misión comercial por la minería. En su representación estuvo Andrés Díaz Cano, ministro de Producción y Desarrollo Económico de la provincia vecina.
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“En los próximos días vamos a estar firmando el convenio de porcentaje sobre diversificación, que es el nuevo acuerdo entre Mendoza y San Juan”, comentó.

Por su parte, el ministro de Economía de la provincia, Martín Kerchner, señaló que este año se logró un consenso con la oposición para que la vitivinicultura “empiece a entrar en el campo de juego”.

“El Fondo Anticíclico mostró un camino que hacía muchos años que no teníamos y que habíamos perdido, y pone a disposición de los sectores económicos herramientas que transforman y preparan la cancha para que se empiece a jugar de otra manera”, indicó el funcionario.